Pages

vendredi, janvier 14, 2011

Leer, pensar, soñar, escribir, nunca rezar... Mon petit paradis...

Retomo mis márgenes, leo, contemplo, escribo. Esta mañana miraba las aves que se paseaban de rama en rama, oí su canto, dejándome invadir por esa voluptuosa imagen de verdes y variaciones de azul, atravesados por pesadas nubes. Silencio prolongado, sensación de armonía, ¿cómo nadie se da cuenta de que es un pequeño paraíso?  Intuyo que algo ha pasado en Venezuela, que no es el mismo país de antes, hay algo que se busca, que se lee, que se presenta en forma de dialéctica, y a mí, eso me fascina. Me entusiasma leer los periódicos y saber que los estudiantes universitarios preparan un gran encuentro para proponer nuevos proyectos al gobierno, que desean dialogar, que dicen, manifiestan, pero sobre todo, oyen... Es una pequeña puerta abierta que a veces es una ventana enorme...

Nunca rezo, ni rezaré, parte de la inercia que invade a ciertos sectores de la población  en América Latina se origina en la religión. No hay nada más castrador que la religión, abajo los cultos!!
Pensado que traduciré La naissance du jour, para el Perú, con un texto de ficción sobre ella, nada más pensar en la idea, me siento febril. Creo que Venezuela me pone febril, sus palmeras altísimas, sus colores, las miradas aterciopeladas de sus habitantes, su delicadeza (esa elegancia que tienen al caminar) y su manera de hablar, que es tan afectuosa....

Siguen lecturas, escritos, correcciones, en suma, la vie...

Aucun commentaire: