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mercredi, janvier 03, 2007

El mar

Pasear por le malecón de Chorrillos es uno de mis placeres más egoístas e intensos. Las playas, ahora, están llenas de gente y desde lo alto del acantilado, todo parece tan festivo, tan ligero, que es casi imposible mantenerse al margen. Ahora pensaba que la vida es generosa cuando estamos dispuestos a recibir. Es mezquina cuando nuestra mirada se cierra. Todo, es, en resumen, una cuestión de interpretación. Cuando desaparecen las normas y las jerarquías en la forma de juzgar, la libertad se pone en movimiento. Pensaba en una lectura sobre Jacques Derrida quien siempre ha pensado la "diferencia", no como una idea fetichista y reductora, muchas personas sienten siempre la nostalgia de aboluto, y la precariedad de toda idea, aterra, sino como contradicción, o como encuentro, o suma de fuerzas. No es entonces una teoría esencialista, menos moralista, ni judeo-cristiana, sino más bien, abierta y de resistencia, de choque, y de contestación. La torre de Babel de la interpretación y de la traducción, todos en idiomas distintos, en formas y códigos diferentes. Y entonces pensé en ese rostro que solo es un rostro y en su belleza efímera que por tanto es en ese instante en que se me revela en toda su finitud y al mismo tiempo, infinito en sus múltiples movimientos. En una mano que se acerca, en la caricia que una me niego a recibir y que significa solo una presencia, una sensación compartida, a la que no hay que buscarle un nombre, pensaba en todo lo que queremos aprisionar con la razón para nombrar y, al mismo tiempo destruir. Pero, ese ¿no es nuestro eterno dilema? Ahora, el mar estaba soberbio, casi viril, encrespado y salvaje, lleno de pelícanos y bañantes. Yo sé que amar la vida con intensidad hace más dura la renuncia, es cuando se ama desesperadamente que se traiciona lo que se quiere, aunque siempre pienso que no somos tan tontas, ese es el lado novelesco de las cosas, pero el real, tal vez sea más simple y no exista renuncia, puesto que no se desea poseer. Tal vez esa sea la clave, no aspirar a nada y dejar las cosas hacer, es como perderle miedo a la oscuridad, a los espacios en blanco, en resumen, la desobediencia en general!!

5 commentaires:

Melissa a dit…

"Pasear por le malecón de Chorrillos". Es esto es influencia francesa?.
Wow no sabía que de pasear por blogs iba a llegar al de una escritora de verdad. Estuve hace unos meses a punto de comprar "Electra en la ciudad"... no sabía que encontraría a su autora aquí. Bueno felicidades por lo que haces, que no es para menos. Bye!

XIGGIX a dit…

ahora vivimos una trampa, nadie es totalmente hosnessto con el otro; la violencia de los años, la violencia de sobrevivir ha convertido al vecino en aqlguien que te escudriña, que te juzga, que busca tu lado mas debil para sobrepornerse sobre ti; para mi la peruanidad se ha convertido en una perpetua agresion, solo hay quienes buscan beneficos crematisticos, ya no hay esa casta de peruanos que lo daban todo porque llegabas a sus casas en cualquier instante, hoy todo es calculo...

MARLON AQUINO RAMÍREZ a dit…

Ocurre que no nos hemos dado cuenta de que la razón, la inteligencia, la lógica, sólo sirven para enredarnos. He ahí la belleza y la calidez de la anarquía: desatarse de todo, soltar las amarras de un barco que no necesariamente tiene que estar ebrio. Ser muy inteligente es una gran tortura. Habría que prestarle más atención al mar,a los gatos, a un árbol.

Reno a dit…

Deberías preguntarte si lo escribes y por lo tanto lo que eres o lo que crees ser es algo casual o causal. Así tendrías menos dudas y no estarías tan desorientada.

Reno a dit…

Rectifico un poquito mi comentario. En la primera oración me comí un que entre el si y lo. De hecho se entiendo mejor así. Y me olvidé decirte que si es que llegas a la conlusión que todo esto es casual sigue escribiendo nomás.